Leonardo, aunque era considerado como un gran pacifista, creó un gran número de máquinas bélicas que nunca llegaron a desarollarse pero que contribuyeron al desarrollo futuro de armas como la ametralladora o el tanque como las que vemos
aquí.
Él detestaba la locura de la guerra pero al final la aceptó como algo inevitable a lo que el hombre no podría jamás escapar. Estos inventos los desarrolló para el Duque de Milán y Cesare Borgia de Florencia.
Vemos
así desde una futura ametralladora realizada con cañones que eran activados uno tras otro hasta carros repletos de cuchillas que cortaban cuantas cabezas se encontraran en su camino sin posibilidad de escape así como ballestas gigantes o carros de combate.
Os dejamos con algunas muestras de su genio bélico.
